Joaquín De La Torre, ministro de Producción de la Provincia de Buenos Aires
A poco más de dos meses de asumir como ministro de Producción de la provincia de Buenos Aires, Joaquín De la Torre anticipa el rol fundamental de los puertos como salida al mundo para las exportaciones bonaerenses, su potencial como generador de recursos y mano de obra y la necesidad de integrarlos cada vez más con sus comunidades. “Deben dejar de estar de espaldas a las ciudades para pasar a ser lugares amigables para todo el sector productivo”, aseguró.
En este breve período que lleva de gestión pudo realizar visitas a las distintas terminales e incluso compartir anuncios de mejoras en infraestructura en servicios, como ocurrió en Quequén con una inversión de 200 millones de dólares o la apertura de la licitación del dragado que tanto se espera y necesita en Mar del Plata. Sobre este último dijo que es una obra imprescindible porque “permitirá vendereste puerto a las distintas navieras para conseguir que vengan más barcos a operar con cargas. Así podremos mirar desde el puerto a la producción del sudeste.
Entiende que uno de los desafíos más importantes en incrementar la carga a partir de mercaderías que tienen su origen en destinos próximos. Por eso advierte que se debe empezar a mirar y aprovechar más a sus puertos vecinos y cercanos. “Pueden ser la salida al mundo que necesitan”, recalcó.
De la Torre destaca que la provincia de Buenos Aires tiene una fortaleza especial con respecto al resto del país por su cantidad y variedad de puertos. A todos los considera importantes, cada uno con sus características y especialidades. “Es un elemento y oportunidad que la provincia tiene que aprovechar desde su mirada productiva”, aunque también sabe que llevará tiempo el cambio que se busca. Está convencido que durante muchos años los puertos fueron mirados “con mala cara o innecesarios porque toda o casi toda la producción se pensaba y destinaba para consumo interno”.
Con la gobernadora Vidal coinciden en este proyecto que implica resolver las urgencias, que por cierto son muchas, pero también buscar previsibilidad y sustentabilidad para las terminales marítimas y fluviales de la provincia. Como ya se está dando con las licitaciones de dragado, el ministro cree que se puede modificar un circuito vicioso que obligaba a resolver solo ante emergencias. “Estamos tratando de ser confiables para los operadores locales y el resto del mundo”, insiste. Para ello cree que ya hay, desde la gestión provincial, gestos claros que permitan “acercar la oportunidad y que se genere esa empatia con los posibles usuarios del puerto”.
Como ya lo ha hecho en las primeras reuniones, explica que a los productores de la zona les explicarán la conveniencia de sacar sus producciones y manufacturas por Mar del Plata. A los cerealeros de la región sudeste lo propio sobre el potencial de Quequén. Y en Bahía Blanca destacarán su fortaleza para superar su actual rendimiento. “Eso implica hacer los deberes y en eso estamos”, describe.
Pone el ejemplo de Mar del Plata y el vínculo estrecho que ha logrado con su puerto. Espera que así sea en todas las ciudades y no solo por lo que se produce en términos de mercadería o servicios. Plantea que quiere puertos que sean “generadores de empleo y también un ámbito amigable con los productores de la zona, sean agropecuarios o Industriales”. Quieren que dejen de enfocar a Capital Federal y confíen más en esos muelles cercanos. Comprometió apoyo de un sector público “involucrado, que invierta y acompañe”.
“Tenemos claro que lo que estamos haciendo hoy no verá resultados en seis u ocho meses, pero un día hay que empezar. Lo importante es que haya políticas de Estado que vayan más allá de lo inmediato y puedan solucionar los problemas de fondo”, insistió.
En términos de puertos e industrias vinculadas también resaltó la oportunidad que tiene Astilleros Río Santiago. “Está de pie y trabajando, con muchos proyectos por delante”, asegura. Uno de ellos es albergar un parque eólico. Dijo que el astillero tiene que seguir haciendo barcos pero también “tiene otras potencialidades para hacerlo rentable”.
En su área de gestión también pesa y mucho el turismo, al que los puertos también aportan como atractivo. En vísperas de una temporada que hace foco en la costa bonaerense, aseguró que ya se trabaja en el largo plazo. “Hay que revertir un proceso que hizo perder brillo a la provincia”, sentenció. Además planteó que para el ministerio a su cargo “el turismo se ve como generador de mano de obra”.
“Escuchar y caminar son parte de nuestra gestión”, remarcó. Como ejemplo puso contactos con la industria textil y la amplia reunión con actores de la pesca marplatense. Recordó que la propia gobernadora “recibió a todos los sectores y se sentó cinco horas con ellos para buscar soluciones”.
FUENTE: NOTITRANS